lunes, 28 de septiembre de 2009

¿Tú nos quieres?

Fue hace tiempo. Me había quedado a pasar el fin de semana cuidando a dos niños. Nos encantó a los tres.

La mañana que amanecí con ellos, entre cosquillas y potreos de cama, el más chiquitín se paró y me dijo muy serio:

- Belén, ¿tú nos quieres?

(Caída de baba por mi parte)

- Pues claro que sí, ¡os quiero un montón!

(Silencio reflexivo por su parte)

- ... Entonces, ¿por qué mi madre te paga?



No le respondí. Creo que no hay respuesta.

¿Qué le hubierais dicho a esos ojos grandes y a esa boca con churretes de ColaCao? Se admiten sugerencia, aunque sea a toro pasado...

Principio y final...

... depende de cómo se quiera ver. Así resumía un amigo mío estas fechas del año. La vuelta a la Universidad, al otoño, a la rutina, a los madrugones, a los trabajos, al autobús y al metro, a los sábados en Torreblanca, a las clases particulares, a las comidas en la Cafetería de los Gatos, a ver las caras de tus compañeros de clase each and every day... Cosas buenas y no tan buenas que vuelven a mi vida conforme se aleja el verano.

Con esta entrada cierro definitivamente mi Verano 2009 (no, no es un recopilatorio de canciones chorra). No tengo tiempo de hacer balance ahora mismo, pero tengo que escribir muchas de las cosas que me han pasado estos últimos tres meses durante lo que puedo llamar sin miedo a equivocarme "el mejor verano de mi vida".

Y ahora, a pasar página. A empezar con ganas, a estrenar cuadernos, a proponerse ir a clase... todo eso.

Siempre que llega septiembre me acompaña un recuerdo de infancia, aquel olor de las gomas Milán recién estrenadas... ¡¡Daban ganas de hacer deberes sólo de olerlas!!

Ánimo y gomas Milán para todos :)

The Time Is Now

A principios de este verano estuve en un camping con unos amigos. Podría escribir decenas de posts sobre ese viaje, pero ahora quiero sacar a relucir solo un detallito, algo que me llamó mucho la atención.

El chico de la cafetería, aquel muchacho de veintipocos que ponía los cafés tan sonriente, tenía un reloj con un papel pegado a la esfera, donde podía leerse escrito a mano: AHORA.

Solo ahora es ahora, está claro.

Y ese "ahora" acaba de pasar.

Menos mal que hay otro...

Tarde, se fue.

domingo, 27 de septiembre de 2009

The Uniform Project: Moda inteligente (y solidaria)


La idea es original: una chica comprometida con una causa (una asociación que promueve la educación en India) se propone un reto y va recaudando fondos, porque a la gente le gusta el proyecto.

En su blog, Sheena Matheken publica diariamente el look del día, compuesto indefectiblemente por el mismo vestido (negro, sencillito) durante todo un año; aderezado, eso sí, con collares, chalecos, pañuelos, bufandas, gorros, chaquetas, etc.

El proyecto comenzó en mayo de este año, y a día de hoy la chica lleva más de 14.000 dólares recaudados para la causa, la Akanksha Foundation.

La idea me encanta. ¿No van los famosos a "Mira quién baila" a ganar dinero para asociaciones y demás proyectos? Pues esta chica ha encontrado su manera personal de promocionar la fundación, y a mi modo de ver es incluso mejor.

Aunque la idea estuviera desvinculada a cualquier proyecto solidario, ya sería positiva la iniciativa al demostrar algo tan sencillo como que el estilo no es llevar cosas caras y estrafalarias. La moda la haces tú, día a día, reciclando, componiendo, customizando. Una misma prenda puede dar mucho juego si le echas imaginación.

Además, no me parece ético ni cristiano tener un bolso de Louis Vuitton que te ha costado 1.500€ y luego no darle un euro a la muchacha que pide siempre enfrente del Corte Inglés.

Y lo dice una que no le haría ascos al bolso en cuestión... Pero está claro: ser elegante no es necesariamente ser shopaholic, y The Uniform Project es un claro ejemplo de ello.