viernes, 23 de enero de 2009

Añoranza de primavera


La primavera no empieza para mí el 21 de marzo. Quien mantenga que esa fecha marca el inicio de dicha estación, es que no ha estado en Sevilla.

Pero la primavera tampoco empezará para mí cuando el aire se llene de azahar y los primeros rayos cálidos de un sol impaciente se asomen por las ramas de los áboles centenarios de Maria Luisa... (qué moña soy...)

¡Qué va!

Para mí este año la primavera empieza oficialmente el día 5 de feberero a las 18:45 aproximadamente, o en otras palabras, cuando salga del despacho de los profesores de interpretación habiendo inventado/bordado un discurso.

Me da igual que sea principios de febrero. Para mí ese día se habrá acabado la tristeza y el dolor, se habrñan acabado:

  • los dossiers de italiano
  • los encargos de informática de hola-sí-quiero-que-me-enviéis-esto-en-24-horas
  • las traducciones de electrodomésticos
  • las prácticas (bohemias) de geografía
  • las lecturas infinitas de historia moderna
  • los apuntes infumables de Terminología ((POR DIOS COMPRO LIBRO DE Mª TERESA CABRÉ (1999) A CUALQIER PRECIO!!!))

y un laaaargo etcétera.

Que no salga de aquí... pero yo quemo la UPO.

1 comentario:

El peregrino dijo...

Feliz primavera entonces. Dejo mi saludo con un retraso de una semana.
Buen blog. Saludos desde Bogotá.